25 noviembre 2014

Entre denuncias y propuestas

El último artículo que acabo de leer del profesor Navarro, se refiere al cambio trascendental causado en el mundo occidental por Reagan y Thatcher, con la introducción del neoliberalismo, como doctrina político-económica en los años ochentas del siglo pasado que permanece en nuestros días, en contraste con el keynesianismo reinante entre 1945 y 1980, que favoreció a los trabajadores como consecuencia de los espectaculares aportes hechos por la tecno-ciencia con la reconstrucción de los destrozos causados por la Segunda Guerra mundial.

A la vista de los beneficios alcanzados por los trabajadores por primera vez en la historia, tanto con el sustancial aumento de sus sueldos y sobre todo en sus derechos laborales, que los aproximaba a los que los monopolizaron como los únicos poderosos desde la más remota antigüedad, que pronto les fueron restituidos con la política neoliberal implementada en los años ochenta mediante el neoliberalismo que ha devuelto los privilegios a la rancia liturgia practicada tanto por las religiones como por la herencia de títulos nobiliarios otorgados por hechos guerreros y por la explotación de esclavos al servicio del señor, como trabajadores sin derechos.

El profesor Navarro pone como ejemplo de gran explotador de privilegios adquiridos a Bill Gates, que no parece lo más reprobable, puesto que lo ha sido por meritocracia personal, que parece menos sangrante que lo recibido por la familia Alba en España, por espacio de cinco siglos. El profesor Navarro que dice haber sido contratado junto con Juan Torres para asesorar a Podemos para confeccionar un programa de futuro gobierno, adolece en nuestra opinión de tener mucho más aciertos en denunciar lo reprobable que en proponer soluciones. Por el contrario, Pablo Iglesias, se caracteriza por hacer propuestas razonables, difíciles de aplicar en el contexto que está España actualmente.

Un ejemplo plausible de los riesgos a los que se presta Pablo Iglesias, como es el test al que le ha sometido Jordi Évole, con ocasión de la visita que hicieron ambos a Ecuador para la entrevista con el presidente de dicho país. El examen exhaustivo de todas y cada una de las propuestas hechas por Podemos por boca de Pablo Iglesias, constituye un examen en toda regla de los riesgos que entrañan las más polémicas que son la mayoría de ellas, que difieren sustancialmente de los planteamientos asentados en el entorno europeo, pero sobre todo con las actuaciones puestas en práctica en nuestro país, por los dos grandes partidos que nos han gobernado desde el advenimiento de la democracia.

Difícilmente se pueden encontrar planteamientos tan dispares al contexto político-económico en el que nos encontramos actualmente, hechos por un aspirante a gobernar nuestro país, como los que ha hecho hasta aquí un aspirante a la mayor magistratura del país, que no sean las de un revolucionario utópico, consciente de su plausible debilidad, frente a los obstáculos que se le oponen. No obstante lo cual, el aludido se muestra confiado en sus posibilidades, lo que de por sí constituye un valor fiado en la confianza de que el país está obligado a salir del impás en que se encuentra a consecuencia de la corrupción institucionalizada entre políticos que se han valido de sus prerrogativas de mando para llenar sus bolsillos. Nada más aberrante que los llamados a ejercer el bien común con el voto de los ciudadanos lo apliquen en ejercitar la codicia, vicio tanto más oprobioso, cuando los votantes les dieron su confianza.

Otro razonamiento, que parece más apropiado para deshacer entuertos como el de la corrupción, sería el uso de los instrumentos que la tecno-ciencia ha puesto al servicio de los humanos que deberían ser aplicados para incorporar el mayor bienestar a la mayoría de favorecidos posibles, que precisamente se corresponden con propuestas hechas por Podemos, si bien, para completar la desiderata formulada, sería preciso contar con las mínimas condiciones permitidas por el contexto actual del país en que se pretenden implantar. Los instrumentos a los que nos referimos para mejorar la acción de gobierno de los pueblos, son los que permiten colocar a las personas que han alcanzado el reconocimiento de sus colegas en cada una de las especialidades en que se desarrolla la vida moderna, mediante la elección directa, para formar los thing-tanks destinados a asesorar a los gobiernos, depurados por la acción asamblearia, para la selección de las instancias superiores de gobierno. El anterior proceso, avalado por la facultad de cómputo de la informática sería de toda garantía.

Seleccionadas mediante los avales expuestos las personas idóneas para el ejercicio de gobierno, asistidas de las facultades de procurar el bien de sus administrados y sujetos a los modernos instrumentos de control, asesorados por think-tanks de las distintas especialidades para establecer las estrategias de actuación en un mundo globalizado para desarrollar proyectos de implementación de recursos aún vírgenes, existentes en países receptores de servicios que les pueden ser prestados para beneficio recíproco de las partes contratantes con la rúbrica gubernamental, de mayor garantía que la que pueden dar las multinacionales orientadas al lucro de los socios que las forman, en vez de optimizar los recursos disponible en cada país, dado salida a sus excedentes tanto de equipos vacantes como mano de obra consiguiendo con ello equilibrar el mundo.

Los gobiernos de los pueblos modernos, tendrán que tomar bajo su responsabilidad los aspectos que inciden de forma crucial en la vida de las personas, como son aquellos que los países escandinavos ya transfirieron en los años treinta del pasado siglo con el Estado del Bienestar, junto con los que tradicionalmente se vienen empleando, y los que la modernidad va implementando en algunos países como son: infraestructuras, vivienda, energía, transporte público, agua potable, ecología, bancos, ….todo ello modulado por la fiscalidad adaptada a las necesidades que aconsejen las circunstancias cambiantes, para asegurar que nadie esté desasistido en sus necesidades básicas mediante una renta básica que asegure a todos tener el derecho a una vida digna, en el plano material y sobre todo a evitar los enfrentamientos de clases, en dignidad.