26 marzo 2010

Planteamientos divergentes

El panorama político que se observa en la marcha del mundo en la coyuntura actual, presenta dos comportamientos que podrían percibirse como antagónicos; al tiempo que la globalización mantiene firmes relaciones entre personas y países, lo que debería auspiciar empatía mutua, aproximando y compartiendo los logros positivos de ambos sistemas. La polarización política, sigue en los países democráticos donde existe la alternancia de dos partidos mayoritarios.

Los sistemas políticos que tildamos de antagónicos, son: “el primer mundo” y “los países emergentes”. Los aspectos que caracterizan dicha diferenciación, son los hábitos económicos que, en el primer mundo, se incita al consumo con una publicidad agobiante, que con el ingente volumen de medios y dinero dedicados a tal fin, consigue seducir al auditorio al que va dirigida por el efecto Goebbels: “una mentira mil veces repetida se convierte en verdad” aumenta el consumo, hasta degenerar en despilfarro, causando la degradación ecológica.
Otras consecuencias nocivas a causa del excesivo consumo son: la obesidad que es alarmante en muchos países y el endeudamiento que lleva a familias a la ruina, por pretender disfrutar de las cosas antes de disponer de dinero propio para adquirirlas. A las facilidades de crédito dadas por las finanzas virtuales muchos atribuye las causas de la crisis actual, que ha producido el paro que afecta a los más pobres, al tiempo, que ha incrementado de forma escandalosa el diferencial entre lo que perciben los más ricos, que hace pocas décadas se cifraba en 40 veces, lo que hoy son 80 veces más, lo que cobra un alto directivo de empresa, del sueldo medio que perciben los obreros de la misma.

Los países emergentes que conforman el otro bloque, se diferencian a grandes rasgos del anterior, en que vienen de una situación económica baja, cercana a la que tiene el tercer mundo actual, que aún no figuran en el ranking del progreso. La situación de pobreza de que partían hace unas pocas décadas dichos países, obligaba a sus moradores a aplicar hábitos y costumbres austeros y frugales que siguen manteniendo y aún con bajos sueldos consiguen ahorrar, al tiempo que se muestran orgullosos de las mejoras del nivel de vida conseguidas. Bajos sueldos, hacen a los productos manufacturados que emplean abundante mano de obra competitivos, que es el parámetro que más facilita la exportación en el actual mundo globalizado. Cuando las ventas se incrementan, los países beneficiados por dicho efecto, nutren sus arcas de dinero que pueden dedicar a potenciar sus infraestructuras físicas: comunicaciones al interior del territorio, facilidades logísticas para la exportación, industrias estratégicas, urbanismo y construcción residencial, para la transferencia de grandes masas de población del campo a las ciudades, etc,.. sin descuidar la promoción de los intangibles que son la garantía de futuro de los países: educación, formación de especialistas para suplir las necesidades que aparecen con rapidez inusitada, producto de los cambios de paradigma que imponen los nuevos tiempos .

Las naciones emergentes como su nombre indica, parten de posiciones: físicas, organizativas , jurisdiccionales, políticas, culturales, económicas,...inéditas; podríamos compararlas a la Europa surgida de la segunda guerra mundial, que cambió aspectos estructurales, esencias constitutivas de la mentalidad colonial, que anteriormente había configurado actuaciones nacionalistas conducentes a conflictos bélicos de afirmación patriótica-ideológica-económica
que por dos veces sin solución de continuidad durante medio siglo, mantuvo al viejo continente tan convulso e irracionalmente desquiciado con su reguero de muerte y destrucción, afectando a tal punto las conciencias de los descendientes del desastre, que han transitado en el siguiente medio siglo, de las fronteras infranqueables y hostiles, a hacerlas permeables al punto de fundar la Unión Europea, que en sucesivas etapas tiene vocación de aportar a los países miembros condiciones mutuamente beneficiosas para sus moradores.

Nos permitimos poner en paralelo dos cambios que consideramos los más trascendentales, que se ha podido experimentar en la vida de una persona longeva. Las consecuencias sacadas de los desastres descritos en el punto anterior en Europa y las que se podrían derivar de la elección de un negro en el país del ku kux klan, en EE.UU., que a pesar de tener enormes limitaciones en la aplicación de sus promesas al amparo de una campaña electoral, que le permitían apuntar sus intenciones explicitadas en sus discursos post toma de posesión, unido a la debacle económica causada por la crisis económica, se ha experimentado en todo el mundo un soplo de aire fresco con el notable retroceso de la filosofía neocon que mantenía el mundo al borde del precipicio, a imitación de lo proclamado por Foster Dulles durante la guerra fría, que expuso al mundo a riesgo de su extinción.

Con base a los acontecimientos cruciales que han tenido lugar en el transcurso de un siglo, que solo representa un lapso insignificante en la historia de la humanidad, deberíamos apercibirnos de la trascendencia que imprimen los hechos que tienen lugar actualmente, en que, el impacto producido por los humanos en el planeta son determinantes en orden a su continuidad, positiva o negativa en función de las acciones que emprenda el factor humano. Nunca como ahora, el instrumental: físico e intelectual del que se dispone ha sido tan decisivo para encauzar los acontecimientos de futuro, al disponer del auxiliar idóneo que permite la intercomunicación continua e instantánea entre los responsables de las distintas áreas de actuación del planeta:
LA INFORMÁTICA. Tienen razón los que piensan que más importante que el instrumento es la voluntad del que lo usa. Aquí aparece siempre la desiderata utópica de quien puede pensar que la inteligencia, que solo se adquiere con la educación dirigida hacia el bien común, impreso en las constituciones pero interpretado torcidamente por intereses espurios, asumimos que queda mucho trecho que recorrer para erradicar prejuicios interpuestos por: intereses, ideales, costumbres,..que solo el buen juicio y/o la aceptación por los afectados de las actuaciones de los responsables de la marcha de los asuntos en cada una de jurisdicciones en que se divida la administración de los asuntos que afecten a los distintos colectivos humanos.
La humanidad ha dado pasos importantes en aspectos de racionalidad gracias a los aportes hechos por el conocimiento, que, por supuesto nadie puede negar que una parte importante de los mismos se han aplicado a la producción bélica, al punto que muchos argumentos que siguen vigentes en el inconsciente común, siguen convencidos que el mayor aporte al progreso científico- técnico se lo debemos a la investigación armamentística. Aún en el supuesto que en otras épocas haya tenido fuerte incidencia el elemento militar poniendo ingentes recursos a potenciar sus arsenales, nadie podrá poner la menor objeción a tal evidencia, la historia está plagada de hechos militares que por primera vez parece que están en retroceso, en beneficio del conocimiento que nos parece justo que se le otorgue la primacía, a lo que últimamente se le está prestando alguna atención es que el poder blando representado por conceptos tales como: empatía, consenso, solidaridad,...para muchas personas inteligentes y éticas, constituyen aportes positivos al acervo común que sería de desear que alcanzaran prevalencia sobre el poder duro que se aplica a potenciar la industria bélica.