Energías

Hace casi un siglo, que Lenin expresó en otras palabras, que el dios de la modernidad al que la humanidad debería rendir la merecida pleitesía, es a la electricidad, la manifestación de aquella época de las energías, como el factor por antonomasia que caracterizaba el progreso, que llevaría a la humanidad a las más altas cimas de la administración de los recursos de la naturaleza para la: creación, expansión, disfrute, goce,… de los humanos artífices del mayor milagro conseguido a lo largo de la historia.

Estos días se está dilucidando, un posible contencioso entre el gobierno argentino y la empresa multinacional española: REPSOL YPF, en el que ha tomado cartas el gobierno español a través de su ministro de industria, con una severa advertencia sobre las consecuencias que podrían acarrear drásticas medidas al respecto, por la fuerza que le da a España, el ser el primer inversor internacional de dicho país sur-americano, a través de las importantes empresas privadas de nuestro país establecidas en Argentina, lo que al parecer, han conseguido retrasar el anuncio de una resolución que tenía anunciada la presidenta argentina para nacionalizar REPSOL YPF.

La importancia crucial que tiene la energía para el desarrollo de los países, hace que los gobiernos quieran toman cartas sobre las empresas energéticas, a pesar que en el mundo occidental parecen haberse transferido todos los derechos a la privatización generalizada de las empresas impuesta por la economía neocon, con la deriva del poder hacia el dinero financiero, que en la Unión Europea, ha impuesto a ciertos países gobiernos presididos por financieros en detrimento del voto democrático, y en USA, si ganan las elecciones los republicanos, solo: las cárceles, la seguridad , el ejército y la justicia, quedarán bajo la jurisdicción gubernamental, revirtiendo todas las demás instancias administrativas a las empresas privadas.

La denominación peyorativa que se da a ciertos gobiernos sur-americanos, que se apartan de la ortodoxia al uso en el mundo capitalista aunque convoquen elecciones democráticas, pero que recurren a la nacionalización de industrias consideradas estratégicas, países, entre los que se encuentra Argentina, que molesta a gobiernos como el que tenemos ahora en España, que da atribuciones a REPSOL YPF, para resistirse a los requerimientos del gobierno argentino, para que invierta en los nuevos yacimientos petrolíferos alumbrados recientemente en la Patagonia , que permitirían al gobierno argentino contar con una mayor autonomía energética, visto que las actuales reservas petrolíferas argentinas se están agotando como sucede con las de EE.UU. y las del mar del Norte europeo.

Los nuevos yacimientos petrolíferos recientemente descubiertos en la Patagonia argentina, requieren de grandes inversiones para su puesta en explotación como sucede con los hallazgos en aguas profundas del litoral brasileño y las del valle del Orinoco venezolano, que a precios actuales del barril de crudo, las empresas petrolíferas estiman que las inversiones requeridas no son lo suficientemente rentables para su puesta en explotación en este momento, dado que el precio del llamado oro negro ha pasado de cotizarse desde menos de diez dólares el barril de crudo, a más de cien.

En las empresas privadas sus estrategias están orientadas a la rentabilidad a corto plazo, mientras que los países, a pesar de la alternancia de gobiernos de signo distinto en democracia, procuran aplicar formulas a más largo plazo como es la formación de los jóvenes en los centros de enseñanza que ha proporcionado los mayores avances además de los económicos, en todos los demás órdenes de la vida como queda bien patente en las apreciaciones empíricas. Hoy se están desarrollando otras fuentes energéticas como son las energías renovables, que no expolian a las futuras generaciones de recursos finitos como pueden ser: petróleo, carbón,… a la vez que habrá que evitar la degradación del medio ecológico que asegure las mejores condiciones de la naturaleza que nos sustenta.

Precisamente el gobierno argentino, tiene en curso la realización de un contrato con otro país, para la fertilización de ingentes extensiones de terrenos yermos mediante la irrigación artificial moderna, para la producción de biocombustibles y/o alimentos de los que Argentina ya es el tercer productor mundial. Por su extensión territorial, ( equivalente a la de la India y con solo cuarenta millones de habitantes), Argentina podría aportar cantidades ingentes de alimentos: soja, trigo, maíz,… mediante la irrigación y fertilización modernas, haciendo uso inteligente de sus inagotables recursos acuíferos de los glaciares y neveros andinos, mediante presas para la producción eléctrica y el almacenamiento del líquido elemento para la irrigación artificial de sus enormes extensiones de terrenos aptos para ello, previo las inversiones requeridas a tal fin, que podrían ser subvencionadas mediante el petróleo descubierto recientemente con criterios de beneficio mutuo, destinando en pago de las cuantiosas inversión, el petróleo extraído de los nuevos yacimientos recién descubiertos en los equipos de los aprovechamientos acuíferos para la irrigación y la producción de energía hidroeléctrica, que quedarían en beneficio continuado del país beneficiario de las nuevas instalaciones.

Los nuevos tiempos, ponen de manifiesto que existen dos grandes tendencias en las prioridades económicas del mundo: la preconizada por los poderosos de siempre, que fueron siempre muy pocos, lo mismo que sucede actualmente a pesar de la ficción democrática que estipula: una persona un voto para ejercer el gobierno, es el dinero el que mantiene todas las prerrogativas que está en pocas manos. Otra alternativa, sería en el tiempo de las luces que da el conocimiento en el que nos encontramos, sería traspasar el poder a la inteligencia y que los recursos esenciales para el servicio de los humanos fueran colectivos . Veremos en que desemboca tan importante disyuntiva.