04 septiembre 2012

Agoreros y triunfalistas

La crisis en la que estamos inmersos en nuestro entorno inmediato, que influye en los medios publicitarios para hacer pedagogía del catastrofismo, que condiciona nuestros sentimientos y comportamientos a través de las percepciones captadas por nuestros sentidos. Los creadores de opinión sirven mayoritariamente al capitalismo por el efecto pesebre en épocas de crisis económica, por el pánico que genera el paro con la magnitud alcanzada en nuestro país. Por el contrario, no se conocen estadísticas que muestran los avances del progreso habidos a nivel planetario, que seguramente darían como resultado en el supuesto de ser cuantificables, que las producciones de todos los ítems realizadas en el transcurso del último siglo, posiblemente superarían a todo lo conseguido por la humanidad en toda la historia. Basta con enunciar un solo dato para dar idea del cambio que ha tenido lugar: la población humana en el año 1950 la constituían unos 2.300 millones de personas, en 2012 somos cerca de 7.000 millones, tres veces más.

Se puede constatar empíricamente, que todos los artículos que demanda el mercado son suplidos por los medios de producción con los que actualmente se cuenta, para su puesta a disposición de cuantos disponen de los medios de pago para su adquisición, se podría inferir, que todos los habitantes del planeta podrían disfrutar de una vida digna dentro de unos cauces de austeridad que ahora se están recomendando insistentemente, a partir de que todos ellos pudieran contar con una renta básica que les permitiera desarrollar sus facultades en plenitud para contribuir con su granito de arena al bienestar general de las colectividades de los distintos países en el desarrollo de sus peculiaridades y en el universal, mediante el control ejercido por organismos de participación democrática, en un planeta globalizado. Lo que para muchos serán proposiciones utópicas, planteamientos como el del punto anterior, no dejan de contar con apoyos empíricos como es el caso de Noruega, considerado como el primer Estado en el que se han aplicado procedimientos redistributivos gracias a los utilidades aportadas por el gas y el petróleo en que todos sus habitantes son beneficiarios de los montantes que produce la explotación de los mismos, que son el resultado producido por la madre naturaleza de su propio país.

Más representativos que la excepción mundial que se cita en el punto anterior, pueden ser los precedentes encontrados en los comportamientos observados a lo largo de la historia de la humanidad, en que, la escasez de bienes existentes eran disfrutados por los poderosos que eran pocos, sumiendo en la indigencia a los desposeídos que eran multitudes. Dicha norma, costumbre, tradición,… que ha tenido continuación hasta nuestros días, si bien atenuada en lo que se refiere a bienes de consumo en los países más avanzados, si en la gestión política, en la que se concentra el poder legislativo teóricamente regido por ordenamientos democráticos. Sin embargo últimamente, se puede constatar que el poder fáctico, el que fija las leyes por las que se rigen las comunidades más representativas del capitalismo mundial reinante, están regidas por el dinero, que si bien es propiedad de muchos fondistas, éstos lo han confiado a instituciones financieras para que produzca beneficios. Los grandes grupos financieros depositarios de los fondos de las mayorías de fondistas, se constituyen en lobbys oligopólicos que acaparan las finanzas virtuales mundiales, cuyo monto representa varias veces el valor de cuantos activos reales existen en el planeta, consiguiendo con ello que países ricos como Alemania, obtienen préstamos del exterior al 1% de interés, mientras que España, país pobre, tiene que pagar por los mismos préstamos, el 7%.

Otro privilegio, si cabe de mayor trascendencia, es que en la Unión Europea, las finanzas virtuales han conseguido someter a países de la periferia al oprobio de unos rescates que en el caso de Grecia e Italia además, les fueron impuestos a jefes de gobierno procedentes del gremio de las finanzas y además con unas condiciones legislativas draconianas para los de abajo, pero con todas las garantías para las finanzas que reciben los préstamos necesarios para mantener a la banca a flote, mientras que los trabajadores son puestos en el trance de perder los beneficios del Estado del Bienestar, que ha sido la mayor conquista social alcanzada por los sindicatos obreros en su larga lucha para la dignificación del trabajo y de sus ejecutantes.

Las finanzas virtuales que tienen su mayor campo de actuación en la especulación, que produce sus mayores beneficios acaparando: energías, alimentos, materias estratégicas,… produciendo escasez para subir los precios, junto a multitud de artilugios de los que se valen para mantener y/o acrecentar sus privilegios seculares, mediante la transmisión hereditaria, que no parece compatibilizar con la democracia, cuya proclama publicitaria no se corresponde con los comportamientos de los afectados por dicho proceder que no acaban de tomar conciencia de la enorme estafa a la que están siendo sometidos por unas prácticas político-legislativas que solo benefician a los poderosos: los ricos cada vez más ricos, que se permiten hacer ostentación de sus escandalosos activos de decenas de miles de millones de Euros, superiores al PIB de numerosos pequeños países.

Al tiempo que se hacen públicos en revistas especializadas las relaciones escandalosas con nombres y apellidos de los poseedores de las cifras apuntadas, se asegura por parte de los más prestigiosos economistas, que el 1% de dichos privilegiados son los que mueven los resortes de la economía y la política mundiales, en detrimento del restante 99% que vive con la ficción de que cada persona con su voto designa a quien le gobierna, cuando son los poseedores del dinero quienes marcan las normas a seguir.

No se concibe que las juventudes ilustradas que se prodigan en el mundo actual, puedan comulgar con las ruedas de molino que les prodigan tan exiguas minorías de aprovechados que se valen en gran medida del asentamiento secular de los poderosos que han prevalecido en el tiempo gracias a las bajas pasiones humanas, en la coyuntura actual: la codicia que anida en el subconsciente de tantas personas, por el miedo a sufrir el suplicio de la indigencia, que se cebó en las carnes de quienes sufrimos el zarpazo de las guerras.

En el mundo, han habido cambios copernicanos fruto de los avances habidos en el transcurso de las últimas décadas, aportados por el conocimiento desarrollado en centros de enseñanza e investigación, con la extraordinariamente rápida difusión que tienen los mismos alrededor del planeta con ayuda de la informática. Consecuentes con las transformaciones físicas,..que han tenido lugar en infinidad de apartados que inciden directamente en la vida de las personas, éstas, se valen del instrumental que la tecnología pone paulatinamente en sus manos, al punto que son los instrumentos con los que se cuenta, los que más directamente influyen en el devenir cotidiano de los comportamientos y percepciones humanos individuales y colectivos de las comunidades y pueblos del planeta, por el efecto globalizador producido con intercambios de todo tipo, que están teniendo lugar. Seguiremos con la exposición de las hipótesis de desarrollo plausibles, habida cuenta del arsenal inagotable de medios y del potencial con el que contarán las futuras generaciones para la puesta a su servicio.