Prospección estructural

En una reciente tertulia de la cadena SER, invitaron a un peculiar personaje del que dijeron que había alcanzado cierta notoriedad como anticipador de acontecimientos futuros, que con su apellido: Sabio y haber militado en su juventud en la Democracia Cristiana de su país: Italia, expresándose en un español impecable , nos llamó la atención por el cambio copernicano operado en su ideología, al pronosticar que sufriremos los efectos del neoliberalismo reinante en el mundo occidental, hasta los años cuarenta del siglo actual, consecuencia del poder omnímodo alcanzado por las finanzas virtuales. Ha sido el primero que conozcamos, que ha cifrado el volumen alcanzado por de las finanzas virtuales actuales, cifrándolas, en cuarenta veces la producción de artículos y servicios, generados por los habitantes del planeta.

Reconocido por el autor, que los beneficios que generan las finanzas virtuales son el resultado de la especulación, que retroalimentan a los poseedores de dichos productos a través del reparto de los astronómicos beneficios alcanzados por las entidades financieras que con el desarrollo de la presente crisis, que les han sido resarcidos de las pérdidas derivadas del estallido de la burbuja urbanística –inmobiliaria, producto de la exacerbada codicia de los bancos exentos de todo control estatal, por efecto de las omnímodas influencias: político-judiciales –administrativas, donde el dinero genera intereses desorbitados causantes de la corrupción generalizada en tantas instancias de poder. que han puesto en un brete al actual sistema político llamado democrático que ha devenido en oligárquico, por efecto de las abismales diferencias que existen entre las distintas clases sociales existentes en las actuales sociedades occidentales.

Con ejemplos como el anterior, se pone en evidencia, que el neoliberalismo actual tiene el futuro salvaguardado por las instituciones vigentes, aún siendo conscientes que la especulación no es por si misma un factor productor de objetos o de bienestar para las personas, al que sin embargo, se le atribuyen efectos tautológicos asentados en la tradición caciquil, de que solo los ricos y poderoso tenían la facultad de mando sobre el pueblo llano . La eclosión de la cultura que se produce actualmente en los países punteros, debería cambiar los supuestos que conducen al despertar de las conciencias iluminadas por los razonamientos que llevan al esclarecimiento racional de los hechos, consistente en conceder los atributos a los realmente merecedores de dar ejemplo veraz del bien hacer en el desempeño de las funciones asignadas a los múltiples actores que intervienen crucialmente en el desarrollo de la vida moderna. Las aseveraciones de muchos economistas modernos, de que el 1% de la población mundial, se ha apropiado del restante 99% del poder, hasta extremos que permiten a dicha minoría privilegiada la facultad de gobernar al resto de la humanidad, está tomando la categoría tópico, cuyos efectos con la percepción de grandes masas de la población les incita a la protesta perenne sobre tamaño desajuste: político-social- jurisdiccional- institucional,…de las sociedades modernas que no aciertan alcanzar los presupuestos de paz social mediante el entendimiento racional entre las personas.

Diferentes autores describen a la actualidad, como el espacio en que la luz neuronal, de tantas mentes que tienen acceso a informaciones secretas, celosamente guardadas por las autoridades más poderosas del orbe, como está quedando demostrado en las declaraciones hechas por Julian Asange, en wikileaks, seguidas por las de Snowden, acogido por Rusia, con la protesta del imperio de nuestro tiempo, que había llegado a prometer un ataque militar de castigo contra Siria sin la aquiescencia de las Naciones Unidas como es preceptivo, cuyos precedentes aplicados en Iraq y Afganistán han sido nefastos, y este último intento contra Siria ha tenido una amplia contestación mundial, gracias a la gestión acordada con Rusia, para evitar en lo sucesivo los riesgos de nuevas conflagraciones militares con la existencia del arma nuclear en demasiados países, que podría conducir a la extinción de la vida en el planeta Tierra.

¿Es posible que la humanidad se apreste a acometer nuevas aventuras bélicas cuando los beneficios del progreso tecno-científico ha llevado en el transcurso del último siglo ha alcanzar metas de superación en los innumerables campos del saber moderno, que para las dos o tres últimas generaciones que nos han precedido, habrían calificados de verdaderos milagros? Solo la adopción de una locura colectiva podría permitir a las comunidades actuales permitir anuncios como el que hizo Obama en fechas recientes contra el sentir de mayorías aplastantes de gente responsable, que repugna de tener al frente de los países importantes a actores tan influyentes que puedan poner al mundo evolucionado como es el actual, al riesgo de echarse en manos de irresponsables, a los que irónicamente les ha sido concedido el Premio Nobel de la Paz.

Es inconcebible para cualquier mente civilizada actual, que el enfrentamiento entre dos formas de ver el mundo en función de ideologías enfrentadas por la defensa de intereses materiales contrapuestos, como son la prominencia de lo acumulado en el tiempo, con el producto que es capaz de aportar cada individuo al acerbo común de la humanidad, en la infinita muestra de actuaciones de que son capaces de manifestarse las neuronas humanas, en sus aportes al progreso moderno. Remontándonos a muy pocos siglos atrás, en que la humanidad atisbó los beneficios potenciales que podía aportar la tecno-ciencia, para salir de la rutina secular de vivir de los recursos naturales que daba de sí la tierra y dedicar las principales luces de sus mejores cerebros: a la guerra, al arte, y a las creencias sobrenaturales,… la inteligencia moderna ha podido bucear en los más diversos campos de actuación para explorar las vías de alcanzar la felicidad de los humanos, mediante la satisfacción de las necesidades físicas, psíquicas, por vía del conocimiento, que distingue a los humanos de todas las demás especies existentes sobre del planeta Tierra, que les responsabiliza de asegurar: conservación, equilibrio, armonía, paz,.. entre los humanos, para el bien general.