03 abril 2009

Prolegómenos del G-20

La reunión de los más altos dignatarios de los principales países del planeta, ha tenido una larga gestación para aproximar posiciones que aseguren su éxito, de otro modo sería un fiasco impensable después de haber despertado expectativas tales como que de sus resultados se espera que emanen las consignas y los medios para salir de la peor crisis en que está sumida la humanidad desde la Segunda Guerra Mundial.

Los cruciales problemas a resolver previamente para salir de la crisis, que deben ser: planteados, debatidos, consensuados y aprobados, en la magna asamblea del G-20 son por este orden:
1º) Limpiar a los establecimientos financieros contaminados por los activos tóxicos.
2º) Proveer los fondos necesarios a las entidades crediticias para darles liquidez.
3º) Restablecer las condiciones idóneas para relanzar la economía; reestructurando, inventando, concibiendo,.. un nuevo sistema económico, que evite caer de nuevo en los defectos, disfunciones, aberraciones,... de cómo ha funcionado hasta aquí.

Han sido advertidas ciertas diferencias en los distintos enfoques preliminares para la resolución de los tres puntos anteriores, en lo que respecta a la prodigalidad mostrada por Obama, con las cifras astronómicas aportadas, para culminar las distintas etapas.
Parece que Sarcozy, Merkel, Zapatero,..quizás están impresionados por el descalabro monumental ocasionado por las finanzas virtuales, originado en EE. UU., que no se merecen un premio tan desproporcionado, quienes, después de haberse embolsado sumas millonarias, consecuencia de una codicia y ambición personal desmesuradas, habiendo sido los causantes del paro desencadenado que es el peor crimen social para quienes han agotado el tiempo de estar cubiertos por el subsidio. Los mismos que consiguieron de las dos legislaturas de Bush, que se les rebajaran los impuestos, a los mismos, que han creado los paraísos fiscales para poner a buen recaudo sus fortunas, a los mismos que para ir a por tabaco, como se dice vulgarmente, hacen uso de su jet mostrando su ostentación frente a la desesperación existente, como le ha sucedido al presidente de General Motors, que ha sido destituido de su cargo.

Un modelo tan ensalzado como el liberalismo económico, al que se le atribuían las mayores virtudes para alcanzar: riqueza, prosperidad y abundancia de bienes para los pueblos y sus moradores, ha desembocado en el mayor fiasco, acarreando pérdidas a millones de pequeños ahorradores que reunían sumas ingentes de dinero que fueron incitados por brokers que recibían por ello altas remuneraciones, al convencerles para acudir a inversiones de alto riesgo.

Las finanzas virtuales descritas más arriba, han sido expedientes tramposos con los que se ha conseguido dinero fácil sin tener que recurrir: a la inventiva, la imaginación y el esfuerzo, que son necesarios para hacer de la economía real, el valor supremo para crear riqueza. Multinacionales por medio de las maquilas instaladas en el tercer mundo, pagando sueldos de miseria, venden dichos productos a precios desorbitados, con márgenes abusivos, mediante el señuelo de al publicidad.
Algunos países emergentes han visto la jugada y dando facilidades a empresarios codiciosos (que suele ser su condición congénita), deslocalizan sus factorías desde los emplazamientos de origen, sin tomar en consideración a los trabajadores despedidos por dicha decisión, puesto que su única finalidad es el beneficio según reza su dogma. Las nuevas instalaciones ubicadas en dichos países cuentan con sustanciales ventajas: bajos sueldos, desregulaciones laborales, amplios mercados que justifican economía de escala, facilidades aduaneras, logísticas, que producen altas rentabilidades también para los países donde se ubican. A tal punto, que se han hecho con una gran liquidez que les permite según se viene especulando, subvenir a las necesidades financieras de las instituciones de crédito occidentales, para salir del atolladero en el que se encuentran en este difícil momento.

Sería una ironía del destino que después de haber hecho burla y escarnio de los métodos ineficientes, ruinosos,... de las economías comunistas, que en este crucial momento en que se han puesto de manifiesto, los insondables pozos negros en los que se está hundiendo el liberalismo salvaje de los orgullosos neocons, que se creían que con las fórmulas mágicas de los: Freeman, Hayek, etc, iban a erigirse en los amos del mundo, si ahora tuvieran que pedir liquidez que es la sangre que nutre el sistema capitalista, a un país que lleva por símbolos: el nombre y el estandarte comunista.

Muchos economistas dan por finiquitado el actual sistema económico, tal y como ha funcionado hasta la fecha. El sentido común más elemental demuestra que las nuevas generaciones no estarán dispuestas a comulgar con las ruedas de molino que imparten las derechas, con su obsesión de las privatizaciones a ultranza. La presidenta Aguirre, trata por todos los medios, a proteger con los hechos a que se favorezca la enseñanza y sanidad privadas, que se rebajen los impuestos a los más ricos y que se abaraten los despidos, cuando sería tan fácil, que los pobres que votan al PP, se plantearan en conciencia analizar fríamente, si las medidas apuntadas benefician o perjudican a sus propios intereses.
Parece evidente que el Estado del Bienestar, pagado por impuestos progresivos, proporcionalmente en mayor cuantía por los más ricos, contribuye a implementar dichos servicios utilizados por los pobres, que constituyen el mayor activo comunal con el que contamos. Si esta seño Aguirre se hiciera con el gobierno de este país, al que por otra parte debe su puesto, conseguido con la compra de dos tránsfugas, por la fórmula empleada en la película El Padrino por el famoso mafioso: de que todo tiene un precio. Así llegamos a la incontrovertible conclusión de que el eslogan lanzado por Pedro Castro el alcalde de Getafe: de que “los pobres que votan al PP, son tontos de los…” al tirar piedras sobre su propio tejado, lo que debería servirles de ejemplo.