La cogestión, base del modelo económico alemán

Una vez más se pone de manifiesto la aproximación de puntos de vista entre Vicenç Navarro y lo que yo pretendo expresar. Si bien, las diferencias de exposición son abismales entre un profesor y un don nadie como yo, queda demostrado en su artículo del 6-3-2014, en el que desarrolla la teoría de que el éxito económico alemán se debe en gran medida a la cogestión entre las empresas de más de 50 trabajadores, con los representantes de sus sindicatos para que los efectos de la crisis no incidieran en los despidos, ni en la bajada de sueldos, mientras que en las empresas de menos de 50 trabajadores, éstos, con los minijobs, han resultado perjudicados.

Por supuesto los argumentos del profesor Navarro son respetuosos con el sistema político-económico establecido, que con la connivencia de los dos grandes partidos mayoritarios de la Unión Europea han defendido con la doctrina Herzt, puesta en práctica por las políticas de Schroeder y Blair, que los socialdemócratas alemanes actuales quieren enmendar, instituyendo un salario mínimo decente que proteja a los trabajadores de las PYMES, totalmente desasistidos.

Los puntos de vista anteriormente apuntados me permiten reafirmar mi teoría, tantas veces esbozada, que a futuro tendrían que ser los trabajadores coordinados con los responsables de las empresas nacionalizadas financiadas por Bancos públicos, que en China parecen ser los sujetos económico-político- financieros que fiscalizan aspectos cruciales que afectan directamente a las personas, como: la limpieza del aire construyendo 76 centrales nucleares para sustituir al carbón contaminante como generador de energía; construido la central de las tres gargantas, para destinar las aguas que generan los monzones en el sur canalizándolas hacia el norte; tendiendo gaseoductos y oleoductos desde los yacimientos en países vecinos hasta su país; con infraestructuras ferroviarias de alta velocidad, autopistas, puertos, aeródromos, como red logística de transporte de viajeros y mercancías; redistribuyendo el territorio para el traslado de centenares de millones de sus habitantes del campo a las ciudades, con urbanizaciones y viviendas para su alojamiento; que aseguran mediante técnicas agronómicas punteras la seguridad alimenticia para su pueblo; que han generado riqueza mediante la austeridad asumida desde un bajo punto de partida, erigiéndose en la fábrica del mundo por sus bajos salarios; en resumen que parece un sistema que acomete los principales desafíos que presenta la vida moderna, asistiendo mediante multitud de obras alrededor del mundo con su numerosa diáspora, ejemplarizando para los países del tercer mundo, fórmulas para salir de la pobreza experimentadas en su propio país, en un corto espacio de tiempo.

Tengo que pedir perdón por haber mostrado únicamente aspectos positivos de un país con el que no he tenido nunca el menor contacto, pero que me han llegado referencias de hechos como los que acabo de exponer, que siempre me ha parecido que los currantes son los que aportan los bienes tangibles de los que se nutre la humanidad y como dice por ejemplo el profesor Navarro, que el Banco Central Europeo preste a los Bancos dinero al 0,25% de interés para que estos cobren hasta un 13% a los gobiernos de los países, por las deudas soberanas contraídas por las entidades de crédito: Bancos y Cajas, me parece un robo a mano armada consentido a usureros a los que se ha conferido el gobierno de los pueblos, con la carta blanca para promulgar leyes contra la racionalidad más elemental, mediante una mayoría absoluta durante cuatro años, conseguida en nuestro país con un programa electoral, contrario a todo lo que ponen en la práctica semanal en sus Boletines del Estado, de sus consejos de gobierno.

Aberraciones como las expuestas, que son consentidas por los partidos mayoritarios que conforman la Unión Europea, legitimando formas de gobiernos como las que sufrimos actualmente los países del sur de Europa, a los que solo se les autorizan las protestas callejeras con restricciones que pueden llegar a aplicarse si las masas de manifestantes se propasan de los límites que ellos mismos establecerán mediante sanciones. En el parlamento los partidos de la oposición pueden aducir argumentos sabiendo que no pueden tener la menor efectividad frente a las mayorías absolutas, como se está demostrando en los debates de leyes y en el estado de la nación, donde el lucimiento de los diputados de la oposición, por mas cargados de razón que puedan estar, son humo de paja frente al sistema llamado democrático basado en depositar una papeleta cada cuatro años que actualmente pueden suponer una eternidad para los espíritus dinámicos que son los medran demandando soluciones en función de las necesidades de cada momento. El sistema vigente está desfasado con respecto a los tiempos que corren, en que se tendrán que dar respuestas oportunas a las demandas clamorosas de las multitudes insatisfechas por causas objetivas que reivindican clamorosamente en las calles de nuestro país, sin visos de tener el menor resultado.

Nuestro razonamiento a través de los argumentos anteriores, trata de poner en el candelero, el asunto de mayor enjundia como es la existencia de clases antagónicas en la defensa de sus respectivos intereses. Por más que se quiera situar al capital como el generador del bienestar y la riqueza de los países y de sus moradores, no creo que se pueda aducir que el capital en su función eminentemente especulativa, que permite la acumulación del mismo en muy pocas manos, como certifican eminentes premios novel de la especialidad económica, que se ha constituido en el factor determinante de la gobernación de los países mediante leyes que les atribuyen todos los privilegios para ello, cuando se ha demostrado, que son los aportes de los conocimientos y del músculo los que generan la riqueza y el bienestar de las personas, siempre que dichos aportes vayan dirigidos al bien general compartido de forma proporcionada mediante el espíritu de solidaridad humana, que fluye de las mentes lucidas que pugnan por desterrar los hábitos trogloditas de la ley de la selva, puestos en práctica a lo largo de la historia de la humanidad que tendrán que ser desterrados por la racionalidad.