Las últimas declaraciones de Obama, hacían referencia a la cara dura de las élites financieras de Wall Street, al haberse repartido 18.000 millones de $ después que el gobierno de los EE UU había desembolsado, somas astronómicas de dinero de los contribuyentes, para librar de la quiebra a las instituciones que ellos mismos habían descapitalizado. Para subsanar tal desaguisado, dijo haber dado instrucciones para que a semejantes desaprensivos, les fueran limitados sus emolumentos anuales a un máximo de 500.000 $.
Episodios como el que antecede, se han dado en tropel en el manejo de las finanzas mundiales, causando tales descalabros en infinidad de aspectos vivenciales de las personas, que descontada la aberración que suponen las guerras, ningún cataclismo puede tener tan fatales consecuencias como la crisis económica que padecemos. Los que depositan en sus ahorros su seguridad frente a situaciones de fortuna adversas, los que idolatran sus tesoros más que a su propia vida, al punto de suicidarse al sufrir mermas de la misma, los que invirtieron el sudor de toda su vida en crear su negocio, y para mi valoración, el más atroz de todos, los que están perdiendo su puesto de trabajo que constituye el sostén de sus familias.
El saber popular de que la avaricia rompe el saco, ¿como ha podido ofuscar hasta tal punto a seres tenidos por inteligentes que superaron a su rival: (el comunismo), con el colorido y brillo de una economía eficiente y consolidada, que ahora se desmorona, por el exceso de codicia. ¿La decisión de Obama al ir contra el principio más sagrado del liberalismo económico, como es la fijación de los emolumentos de los gestores supremos que dirigen el tinglado, supone la mayor transgresión del sistema. Muchas son las voces que preconizan que se tendrán que aplicar drásticos cambios en las finanzas y la economía para acomodarlas a los medios con los que se cuenta hoy en día, que permiten dar paso a nuevos paradigmas de mayor racionalidad.
El instrumental de que se dispone actualmente para asegurar eficiencia, transparencia, rapidez y racionalidad en las actuaciones económicas que son las que proporcionan a las comunidades humanas los bienes y servicios, que aseguran niveles de subsistencia y bienestar que la tecno-ciencia ha puesto a disposición de los privilegiados del primer mundo, resulta obvio, que tendrán que hacerse partícipes de los beneficios que aporta la economía, como función crucial de la vida de las personas, como es el disfrutar de una vida digna para todos los habitantes del planeta.
Lo que muchos conceptuarán como una utopía, si se decidiera acometer un estudio riguroso para determinar el tiempo que sería necesario para alcanzar la anterior desiderata con los crecimientos del PIB mundial de los últimos años, complementado con un medio consistente en que todas las mujeres del tercer mundo tuvieran a mano píldoras post coito, para tener únicamente los hijos que desean, en pocas décadas se lograrían tales grados de bienestar físico y equilibrio demográfico humano que harían de este mundo una balsa de aceite y un paraíso de bienestar.
A este fin, bastaría con situar en los puestos de mayor responsabilidad a los más aptos para el desarrollo de cada una de las innumerables funciones específicas que requiere la modernidad. La primera duda que surgirá ante tan aventurada pretensión, sería: ¿como se consigue encontrar a la persona más idónea para cada función? Creemos que mediante la mejor formación posible facilitada a todos los niveles, mediante el estímulo y la emulación para alcanzar el mayor acopio posible de conocimientos, (el atributo por antonomasia con que cuenta el ser humano) y las facilidades que brinda para efectuar la selección, el currículo profesional y académico de cada persona, por los modernos métodos de cómputo informático, selección que deberá ser confirmada en la práctica de sus actuaciones, avalado por el método científico.
Otra condición “sine qua non” exigida por la modernidad, es la constitución de equipos formados por los mejor cualificados para el desarrollo de cada función, denominados: Think Tanks . Dando por sentado, que se cuenta con la flor y nata de los cerebros y los espíritus objetivamente seleccionados por los medios disponibles, que son inconmensurables, se encomienda a los mismos la crucial función de organizar a las sociedades en sus diferentes estadios de gobernación, a imitación del método científico, que ha sido el que ha hecho mayores aportes al progreso.
Cada uno de los Think Tanks tomará a su cargo y bajo su responsabilidad frente a la sociedad, los cometidos de las grandes áreas de intervención gubernativa: seguridad, justicia, educación, sanidad, empleo, subsidios, energía, agricultura, industria básica, finanzas, urbanismo, transportes, logística, investigación básica y un largo etcétera que incluya cuantas actividades contribuyen a vertebrar las sociedades. Capitulo aparte merecen para complementar las múltiples funciones humanas que ofrece el moderno caleidoscopio de la modernidad, que tendrá que ser cubierto por las PYMES y los autónomos, atentos a suplir las necesidades que surgen a cada momento.
Detallar las funciones y cometidos que habrán de ser asignados a los “Think Tanks no hace objeto del presente esbozo por abarcar tan amplio abanico de actuaciones imposible de prever a priori, además de no formar parte ni de mis facultades ni de mis preferencias; dejo a los eruditos y a los especialistas los detalles, si bien creo que imitar el método científico en orden a adoptar estrategias correctas y sobre todo es capital programar los acontecimientos en función de expectativas plausibles, con : información acopiada de cuanto existe sobre cada tema, hasta la planificación en el tiempo de las actuaciones, la disponibilidad de las asignaciones en función de las prioridades, los contactos de todo tipo con colegas de todas las latitudes, organización de congresos, simposios, conferencias, mesas redondas, etc. Resumiendo disposición y medios para estimular, potenciar, facilitar, el desenvolvimiento de la meritocracia para optimizar los resultados en todas las áreas de la vida moderna.
Se tendrá que dedicar a la función: administrativa, organizativa, gerencial, ejecutiva, a los más idóneos para el desempeño de cada función con absoluta abstracción de convencionalismos que lastran y distorsionan todo tipo de actuaciones: herencias, padrinazgos, cacicadas, influencias, etc., no podrán interferir en las actuaciones factores ajenos a la legalidad de lo establecido por los ordenamientos vigentes. La función del órgano superior de gobierno de cada división administrativa en que se organicen cada uno de los pueblos del planeta, deberá ser ejercitada por los equipos designados por mayorías cualificadas de los administrados, mediante el refrendo explicitado de forma continua y viva por los se brindan a participar en la crítica diaria de los acontecimientos, asesorados por los medios de información y comunicación de que se dispone, a través de los que se podrán manifestar los estados de ánimo y las reivindicaciones de las personas, que tendrán que ser contestados oportuna, rápida y satisfactoriamente aportando argumentaciones convincentes, mediante los múltiples cauces públicos disponibles para canalizar la libertad de expresión.
Otras muchas precisiones deberán ser complementadas por entregas para mediante ejemplos en los que se expliciten la diferencia entre comportamientos deficientes y otros que tendrían visos de ser mejorados, aplicando formulas más acordes con los avances de rabiosa actualidad
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